jueves

El punto y la i

Lennon y McCartney
Jagger y Richards
Rotten y Vicius
Epi y Blas
Pin y Pon

Ahora: Sipán y de los Santos
(o el punto y la i)

Oscar Sipán y Mario de los Santos ganan la tercera edición del premio de Guión de la Delegación del Gobierno en Aragón
ZARAGOZA, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -

Dos jóvenes escritores aragoneses, Oscar Sipán y Mario de los Santos Aparicio, autores del guión 'Il mondo mio', han sido elegidos ganadores de la tercera edición del Premio de Guión para Cortometrajes de la Delegación del Gobierno de Aragón, galardón que patrocina la entidad financiera Multicaja.
El jurado de este premio ha decidido otorgarlo a estos dos jóvenes escritores por mayoría. Como finalistas, el Jurado ha distinguido a Arturo Artal Lázaro, por su guión 'Nacional 311', y a Francisco Rafael Agreda Martínez, también de Zaragoza, por su trabajo 'Camas'. En total, este año, se han presentado cuarenta guiones al certamen.
'Il mondo mio' es la historia de un joven sepulturero, solitario y feliz, que protagoniza un encuentro singular y poético con la última moradora de su cementerio, una joven sepultada viva y rescatada por su propio enterrador. El jurado ha valorado sobre todo la calidad literaria del guión, sus "tremendas posibilidades para llevarlo a la gran pantalla" y "su potencial poético y fuerza visual".
Oscar Sipán Sanz nació en Huesca hace 34 años y Mario de los Santos Aparicio, de 31 años de edad, es de Zaragoza. Ambos son los autores del guión ganador y tienen en común el ser jóvenes escritores.
Los dos tienen varias novelas publicadas y cuentan en su currículo con interesantes premios como el Santa Isabel de Portugal que recibió Sipán por su novela 'Pólvora mojada' o el Premio Fundación Zaragoza 2009 de novela corta que le fue otorgado a de Los Santos por su obra 'La brújula del universo'.

TERRORISMO Y LA VIOLENCIA DE GÉNERO Los dos finalistas destacan por la elección en el tema de sus respectivos guiones. Arturo Artal Lázaro, zaragozano de 30 años de edad, es el autor del guión 'Nacional 311', una comedia que subraya lo absurdo del terrorismo y su diferente rasero a la hora de juzgar barbaries propias o ajenas, que ha sido seleccionada hoy con el segundo premio del certamen. El tercer premio es para el guión 'Camas', del zaragozano Francisco Rafael Ágreda Martínez, una historia-alegato contra los malos tratos con toques de surrealismo e incluso ciencia ficción.
Ambos trabajos recibirán 1.000 euros como ayuda para convertir el guión en cortometraje. En el caso del ganador son un total de 7.000 euros los que recibirá con la finalidad de producir y realizar su proyecto.

martes

Descampado de lunes





Me gustan los descampados.
Los lunes, al salir de jugar al baloncesto, hay uno junto a la parada del 33.
Prefiero aquellos que tienen vallas en las que poder hacer un hueco para entrar.
Las sombras campas a sus anchas entre palieres, socavones, vallas y el maullido de un gato. En lugares como ese jugaba de crío, entonces había más que ahora, y encontraba trincheras donde aprender a morir, ríos que vadear con las botas colgando del cuello, circuitos para caerme de la bicicleta, botellas que romper con el tirachinas, amigos con los que imaginar que nos reíamos de los franceses después de ver “Curro Jiménez”.
Nunca supe qué tenían los descampados, tal vez el encanto de las cosas despatarradas, pero ayer, con la lluvia recién caída, me di cuenta.
Tierra.
Los descampados tienen tierra. Húmeda, fría, misteriosa, amiga.
Tierra.
Los chicos de ahora ya no se manchan. Juegan a la play, chatean, hablan por el movil. Ayer estuve observando un rato y no ví ninguno que se moviera de forma furtiva, con un palo como espada, con el estómago encogido porque sabe que su madre le echará una bronca si lo pilla jugando allí.
No sé si serán mejores personas, pero seguro que son más aburridos. Tener impide imaginar. E imaginar obliga a ser uno mismo, o lo mismo uno.
Cuando llegué a casa, mi pareja me preguntó si había jugado bien. Por fin he conseguido hacerle ver que jugar bien no significa hacer muchos puntos. Antes me preguntaba si había metido muchas canastas.
Le respondo que sí.
Miro el pantalón, todavía quedan manchas de barro.

miércoles

La virgen puta

Hace tiempo que una idea lleva rondándome la cabeza. Sobre todo con una de mis novelas, La brújula del universo, que ha tenido un mal nacimiento, ya se sabe, nacer a destiempo tiene sus consecuencias. La idea era meterla en un blog por capítulos.

Bueno, pues sigue siendo una buena idea, pero ya no es una idea original.

Me manda Óscar un reenvía Óscar un mail de Patxi Irurzun. Y él sí ha tenido valor de hacerlo.

Va a reeditar su primera novela con el título original, La Virgen Puta, pero lo va a hacer en un Blog.

Eso es maravilloso.

El blog será el siguiente: http://lavirgenputa.blogspot.com/.

Yo lo voy a seguir. Y recomiendo hacerlo. Bien porque te guste bien porque la idea lo merece.

Como presentación, os dejo un post de otro blog (http://hankover.blogspot.com/) donde él mismo explica todo este lío.





Una cuestión de supervivencia


Hace ahora once años que publiqué mi primer libro, con tapas duras, una parodia de novela negra, protagonizada por un detective punk. Apareció con el nombre de Cuestión de supervivencia, pero su verdadero título era La virgen puta. Nunca debí dejar que le cambiaran el nombre, nunca, y es un peso, como un muerto, que he arrastrado durante mucho tiempo, preguntándome si acaso mi suerte como escritor habría sido otra de haberme mantenido firme: tal vez algún meapilas se habría escandalizado, me habría hecho gratis la promoción, convertido en un maldito...


Sin embargo, no titulé ese libro de ese modo por ello, simplemente ese ERA su título, y si lo cambié solo fue porque era un pipiolo, porque se trataba de mi primer libro con una editorial de verdad, porque quizás nunca volvería a tener la oportunidad o porque –me decían- "si sale con ese título, en el Diario de Navarra (que es algo así como el Boletín Oficial de mi provincia) no van a decir ni mú"…


Hoy, que el Diario de Navarra y tantas otras cosas me la traen bien floja y aprovechando que en estos días Eclipsados también publicará el que en realidad debería haber sido mi primer libro, Ajuste de cuentos (una colección de relatos aparecidos en revistas y fanzines en los años 90), me apetece hacerle el boca a boca a este cadáver que, creo, está tan vivo, sacarlo de su tumba y dejarlo en brazos de todo aquel al que le apetezca hurgar en la basura.
Por ello, voy a publicar La virgen puta, con su título original, por capítulos (no son muchos, ni muy largos), en el blog
http://lavirgenputa.blogspot.com con portada e ilustraciones de mi amigo, mi hermano Juan Kalvellido, compañero de fatigas durante esta década prodigiosa en la que los dos hemos aprendido que el éxito no es salir en el Diario de Navarra sino aguantar, creer en uno mismo, seguir on the road, siempre adelante, y que se jodan los que escupen y tiran piedras desde las cunetas…

Por lo demás, los capítulos han sido revisados (sobre el original se hicieron algunos pequeños cambios de estilo que yo, que no tengo carácter, admití, sin comprender que de ese modo podían llegar a cargarse mi estilo, o mejor dicho, el del narrador, Felisín) y al final de todas las entregas colgaremos un PDF para que quien lo desee lo descargue. También daremos cuenta de cada nuevo capítulo aquí, en Hank Over.


En cuanto a la edición impresa de La virgen puta, la que lleva por título Cuestión de supervivencia, la editó Altaffaylla kultur taldea (se puede conseguir en
www.gureliburuak.com), a quien siempre estaré agradecido por su apoyo y por ser los primeros en confiar en mí. Sé que su recomendación para cambiar el título fue de buena fe, para protegerme y que en esta ciudad mojigata y cortapichas, con tantas piedras y cadáveres en las cunetas, nadie me inflara a hostias, nada más sacar la cabeza del agujero en el que algunos pretenden confinarnos.

Patxi Irurzun


martes

La batalla de Kruger





Tal como le pasó a la compañera Carmen, el blog llevaba parado un tiempo por una causa simple: quería crecer y yo no le dejaba.
El blog nació para hablar del libro, pero pide voz. Pide hablar de otras cosas. Y no me ha quedado más remedio que darle la independencia.

Eso o cerrarlo.


Y hoy le apetece hablar de una escena maravillosa.

Imagínense, el turista David Budzinski y sus colegas grabando su safari en el parque Kruger, en Sudáfrica. Un río, la sabana, sol, la cámara de video. El guía les señala un punto, enfoca, un grupo de leonas están al acecho de una manada de búfalos que transita por allí. Son unas cinco o seis, agazapadas.
David graba que te graba, los colegas haciendo fotos mientras comentan la jugada y el guía imagino que se enciende un pitillo y piensa que le quedan cuatro horas para regresar al hotel, o lee un libro o le mira el pecho con disimulo a la señora Budzinski.
De repente, el grupo de leonas se lanza al galope y consiguen pillar una cría de búfalo. Entre todas agarran a la cría, la intentan sacar del río donde ha caído porque se ve que no les gusta la carne mojada. Pero al instante, como quien pasa por allí, un cocodrilo/a observa el asunto. Decide que quiere su parte, suelta unos bocados a las leonas, que salen del río con un salto parecido al que daría la señora Budzinski si el guía le diese un pellizco en el trasero. La cocodrila/o agarra a la cría de las trancas traseras, pero las leonas tiran de la cabeza. La escena es impresionante, la cría se extiende como una goma. Finalmente las leonas, que son más, casi sacan al cocodrilo/a (en ningún momento se le ve el género al animal ) del agua y éste/a suelta la presa.
Las leonas se sientan a su alrededor dispuestas a zampársela. Casi se ve brillar la saliva entre los colmillos. La cría de búfala es proteína en estado puro.
Pero, entonces, de repente, las leonas se tragan la saliva, el guía tira el pitillo (o cierra el libro, o se olvida del escote de Ms. Budzinski) y la cámara comienza a echar humo. Un grupo de un centenar de bisontes/as se viene hacia las leonas sin ningún rastro del pacifismo que se les presume. Vienen cabrados/as.
Y mucho.
Se plantan delante de las leonas, qué, pasándolo bien con la niña, les dicen, pues mira, ya que estamos de fiesta, vamos a disfrutar todos.
Uno imagina que, después de tanto ajetreo, la pobre bufalita ya no está para que la salve nadie. Así lo dice una de las comentaristas: itstuleit, itstuleit. Pero oye el gesto está ahí.
Las leonas no suelta la prenda y los bufalos/as parecen dudar hasta que, uno de ellos agarra y de una cornada pone la primera leona en Badajoz. Por si las moscas todavía la encorre un rato. Ahí es nada, la leona dándose con los talones, con seiscientos kilos de cuernos y mala leche detrás, acordándose del lugar aquél, cómo se llamaba, ah, sí, España, donde a los parientes de estos saben cómo tratarlos.
Una vez espantada la primera leona, la búfala -esa tiene que ser búfala- aparece de nuevo en el cuadro; sin mediar palabra, agarra otra leona con la cornamenta y le hace un triple mortal en el aire. El resto de compañeros/as pierden el respeto y comienza la cacería, pero al revés. Los búfalos detrás de las leonas, en venganza por la cría.
A esas alturas a las leonas restantes no les llega la camisa al cuerpo. Siguen aferradas a la cría, pero más por la imposibilidad de escapar -delante cientos de búfalas con sangre de leona en los cuernos, detrás el río con el cocodrilo llorando, en espera de su venganza- que por hambre. Que ya les quedará poca.
Las búfalas se acercan, las leonas están sobre la cría, y en esas, para sorpresa de todo el personal, las leonas se levantan de la cría y ésta se levanta y vuelve con la manada. Las búfalas/os no se ensañan con las pobres leonas, que se les ve castañear las rodillas desde el jeep. Les miran, y como vuelva a pasar, os vamos a empitonar hasta la coronilla, así que venga aire de aquí y que no o volvamos a ver por esta sabana.
David Budzinski dice orgulloso: igaret, igaret. El guía vuelve a encender un pito, o abre el libro o vuelve al escote de Ms David Budzinski. Y las leonas se detienen a distancia para ver cómo mueve el proyecto de comida.
Me imagino la conversación entre ellas.
Esto no puede seguir así. La civilización leona no puede seguir aguantando esos ataques terroristas. Y mientras se reirán. Las mordeduras de cocodrilo son mortales de necesidad, infectan las heridas con unos gérmenes que tienen en la dentadura.
Lo leyeron en algún sitio.